Fundada en 1948 por Helmut Dörre, la actual Elektro Antriebs Service (EAS) forma parte del Grupo Vogelsang desde hace 25 años y, en la actualidad, presta apoyo de forma fiable a numerosos clientes medianos en la reparación, el mantenimiento y la revisión de maquinaria.
Historia variada
Incluso antes de que Dörre tomara las riendas de la empresa el 27 de octubre de 1998, ésta ya contaba con unos 50 años de historia repletos de acontecimientos. Poco después de su fundación en 1948, el taller se trasladó de la calle Wasserstraße a la calle Wohlfahrtstraße, donde, tras la muerte del fundador Helmut Dörre, la empresa fue continuada por su hijo Rainer Dörre hasta 1980, más tarde con el nombre de Elektromotorenbau und Reparaturwerk H. Dörre. Manfred Sommerkamp se hizo cargo de la empresa y cambió su nombre por el de Elektromotoren Dörre GmbH. Tras una década de éxito y crecimiento constante, la veintena de empleados de entonces se trasladó a las nuevas instalaciones del polígono industrial de Rombacherhütte. Además de la acería local, Opel era uno de los principales clientes. Tras años de recibir continuamente pedidos interesantes, Opel atravesó un periodo de vacas flacas durante la época del gerente español José López. Esto condujo a una intensificación de la relación comercial entre Dörre y Vogelsang; ambos ya habían trabajado juntos a mediados de los noventa en el ámbito de la reparación de máquinas más pequeñas.
Dörre pasa a formar parte del Grupo Vogelsang
En 1998 llegó el momento: Elektromotoren Dörre GmbH, que entonces contaba con 14 empleados, pasó a depender de BEW -y, por tanto, del Grupo Vogelsang- y pasó a llamarse Elektro Antriebs Service (EAS).
pasó a llamarse Elektro Antriebs Service (EAS). La idea en aquel momento: mientras que EAS debía especializarse en la reparación/mantenimiento de máquinas pequeñas y medianas, Vogelsang se hacía cargo de los pedidos de motores más grandes, así como de máquinas especiales.
Una estrategia que ha demostrado ser "acertada" hasta el día de hoy. Con un buen equipamiento y una gestión independiente, EAS ha podido independizarse cada vez más de Vogelsang a lo largo de los años. Mientras tanto, unos 25 empleados trabajan para EAS en Rombacherhütte y la cooperación de ambas empresas bajo el paraguas de BEW abarca desde la colaboración en la reparación de motores hasta la formación conjunta de los empleados.